¿Por qué me levanto en la mañana con tan poca energía e ilusión? Y, de ser este tu caso, ¿Crees que esta experiencia es normal? Es decir, ¿La das por hecho, como algo natural en tu vida? ¿Estás resignado? O, por lo contrario, ¿Te atreverías a experimentar con otras alternativas?

Para investigar estas preguntas, propongo empezar con uno de los Marcos de la Felicidad que utilizamos en Delivering Happiness:

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Si tu concepto de la felicidad radica en los placeres sensoriales de la vida estarás esclavizado por la búsqueda constante de los mismos, por el inconformismo con lo que ya no te estimula, y con el hecho de que las sensaciones de placer son temporales y efímeras. Usamos el estereotipo de la estrella de rock que busca los excesos y la exhuberancia para mantenerse estimulado. La felicidad en ese plano es más que volatil, incluso teniendo el dinero y la libertad para conseguir todos estos estímulos! Si este es tu concepto de la felicidad, es probable que tu despertar los días de semana, antes de ir al trabajo, no sea tu mejor momento.

La experiencia de la felicidad se vuelve más sostenible cuando tu actividad del día a día te apasiona. Mihály Csíkszentmihályi, en su libro, Fluir: La Psicología de las Experiencias Óptimas, establece que eres más feliz cuando estás en un estado que el llama de flujo, donde tu actividad te tiene completamente inmerso, donde se pierde incluso la noción del tiempo. Normalmente son actividades que te apasionan, donde consigues un equilibrio que te permite utilizar de forma óptima tus competencias, cualidades, y conocimientos sin aburrirte y sin agobiarte.

Indudablemente, te levantarás por la mañana con más ilusión si parte de tu día está destinado a una actividad que te apasiona y te produce “flujo”. Así, tu felicidad es más sostenible y tienes más control sobre ella ya que no depende del incierto placer pasajero. Aún así, tu motivación es un factor a tener en cuenta incluso cuando te apasiona lo que haces. La sensación de progreso, la de tener retos, la de crecer, y de ver que lo que haces tiene un propósito y un significado tiene un rol importante en tu sensación de felicidad.

Hemos visto en muchas ocasiones a atletas que aún estando en la cima de su deporte, que han disfrutado con pasión, se retiran citando que ya no están motivados para seguir adelante. Hay una falta de motivación que puede deberse a muchos factores. En muchas ocasiones falta un sentido de propósito que los motive. Por ejemplo, teniendo en cuenta que Rafael Nadal ya ha ganado todos los grandes torneos, parte de su motivación podría ser continuar siendo una inspiración para futuras generaciones de deportistas de élite, por la importancia del deporte en la sociedad, por el beneficio que trae a miles de jóvenes, por que dicho propósito es mayor que lo el puede lograr el por si mismo, trascendiendo la persona, convirtiéndose así en su real legado.