Los empleados poco comprometidos con la empresa generan pérdidas monetarias. Tan solo en Estados Unidos se estima que las compañías pierden entre 450 y 550 billones de dólares por tener empleados poco comprometidos. Estas pérdidas no se deben solo a la baja productividad, sino que también se relacionan al reemplazo de personal: En promedio una organización deberá emplear una quinta parte del salario anual de un trabajador para encontrar a quien lo reemplace.
Entonces, ¿cómo se contrarresta la rotación de personal y se incentiva la productividad? La respuesta es sencilla y la encontramos en la inversión en el salario emocional.
Beneficios del salario emocional
El salario emocional son todas las ventajas no monetarias que una empresa ofrece a sus empleados, son todos esos elementos extra que nos hacen trabajar más a gusto. Su objetivo es lograr que el empleado se sienta satisfecho emocional y moralmente, de forma que vea un futuro estable dentro de la compañía. Las nuevas generaciones le dan más valor a su vida familiar que a una compensación monetaria, lo que tiene un impacto directo sobre su productividad. Esto nos deja muy en claro que hoy en día existen factores más importantes que el dinero a la hora de elegir un lugar para trabajar, y es que además, debemos reconocer que no es solo la empresa quien elije al empleado, sino que también son ellos quienes elijen a la empresa, estamos en una relación empresa – empleado en la que ambos buscan una ganancia.
El mayor beneficios del salario emocional son los empleados felices, quienes de acuerdo con estudios son 300% más innovadores (Hardware Business Review) y 33% más productivos (Greenberg & Arawaka). La satisfacción laboral también disminuye hasta en 51% (Gallup) el ausentismo laboral.
¿Cómo pueden las empresas ofrecer un salario emocional competitivo?
- Horarios flexibles: Los extendidos horarios en las oficinas dificultan que las personas puedan establecer un equilibrio entre su vida personal y profesional, lo que termina generando frustración en los empleados. Tener un esquema de horarios flexibles hace que la persona trabaje por objetivos en lugar de estar calentando una silla. A la larga se sentirán más satisfechos al sentir que tienen control sobre su tiempo.
- Planes de carrera: El que exista un plan de carrera para cada persona en tu organización genera una sensación de seguridad, de proyección y de compromiso bidireccional. Ofrecer programas de formación dentro de la compañía es una excelente forma de ofrecer un salario emocional competitivo. Con esta estrategia fidelizamos al empleado y proyectamos su futuro.
- Trabajo remoto: Esta estrategia funciona con cargos que tengan características que así lo permitan. Es efectiva porque incentiva el tiempo con la familia, aumenta la productividad y genera motivación. No obstante, la empresa debe de tener una cultura muy fuerte y objetivos claros para que esto funcione.
- Bienestar: Son programas que promuevan una alta calidad de vida, al incentivar el ejercicio, las comidas saludables y sanidad mental. Las personas que hacen algún tipo de ejercicio y que están en su peso adecuado rinden 86% más que las personas sedentarias.
- Actividades de integración: Estas actividades generan un mejor clima laboral en la organización, promoviendo la empatía entre los miembros de la empresa, lo cual crea puentes de colaboración y comunicación. Es igual de importante fomentar la participación de los empleados en la toma de decisiones para generar un mayor nivel de compromiso con su trabajo, ya que se sentirán más valorados dentro de la organización.
- Cultura organizacional: Es importante que todos los que forman parte de la empresa vivan los valores de su cultura. Esto juega un papel fundamental en el salario emocional, ya que permite que se identifiquen con la filosofía y misión de la empresa, permitiendo que todos entiendan mejor el objetivo de sus actividades diarias.
¿Quieres saber cómo alcanzar la felicidad en tu organización? ¡Hablemos!
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