Hay periodos en los que estás muy motivado y tienes ganas de aprovechar el tiempo al máximo y otros periodos en los que tu motivación es baja y sientes que necesitas hacer algo para entrar en una dinámica positiva. En cualquiera de los casos, estos consejos te servirán para mejorar tu productividad en tu día a día. Igual algunos ya los conoces pero siempre se puede aprender algo nuevo.

¡Feliz lectura!

1.- Llega temprano al trabajo: Si eres de los primeros en llegar, empezarás el día con menos distracciones y te podrás concentrar mejor. ¡Seguro que algún día lo has comprobado! Ahora sólo falta que forme parte de tu rutina.

2.- Planifica tu día y agenda horarios para cada tarea: Antes de irte de la oficina deja lista la agenda de tareas para el día siguiente y el tiempo que le quieres dedicar a cada una de las tareas.  

3.- Haz lo que menos te apetezca lo primeroEn lugar de retrasar lo que menos te apetezca, quítatelo de encima cuanto antes. ¡Verás cómo te sientes liberado!

4.- Evita el multi-tasking: Haz las tareas de una en una. A veces parece que uno es mejor si es capaz de hacer más cosas a la vez pero la realidad es que el nivel de concentración es muy inferior así que focalízate en una tarea y cuando la acabes, pasa a la siguiente.

5.- Ordena tu espacio de trabajo. Trabaja en un espacio ordenado donde no tengas que perder tiempo buscando documentos. Esto mejora tu desempeño, estimula tu creatividad y aumenta tus ganas de ponerte a trabajar. No se trata de perder mucho tiempo pero límpialo un día y el resto de días sólo habrá que mantenerlo!

6.- Evita las distracciones tecnológicas: Facebook, whatsapp, twitter, navegar por internet… son los peores enemigos de la eficiencia. Olvídate de todo esto durante tus horas de trabajo y asigna espacios en los que consultarlo (antes de entrar al trabajo, a la hora de comer…). Haz la prueba y verás cuanto mejora tu productividad.

7.- Haz pausas: Tu cuerpo y tu mente necesitan pausas para recuperar energía así que cuando planifiques tu día, incluye varias pausas breves a lo largo del día. ¡Con 5 minutos puede ser suficiente pero muévete de la silla, camina, estírate un poco y estarás listo para empezar otra vez!

8.- Duerme las horas que tu cuerpo necesite: más o menos todos sabemos cuántas horas necesita nuestro cuerpo para sentirse descansado. Si para ti es importante sentirte productivo, intenta dormir eso número de horas. 

9.- Elimina tareas innecesarias: normalmente tenemos tendencia a ir añadiendo tareas a nuestra agenda en lugar de reducir algunas. La recomendación sería repasar tus tareas (tanto personales como profesionales) y ver si hay alguna que puedas suprimir o aglutinar (ej. ¿Es necesario ir al súper 3 veces por semana o podría ir sólo 1?).

10.- Fíjate metas diarias: si te propones conseguir ciertos objetivos al final del día, hará que te mantengas enfocado.

11.- Identifica tus horas pico: descubre a qué horas te sientes más productivo, motivado y con más energía y dedica ese tiempo a las tareas más complejas e importantes.

12.- Define plazos: establece fechas de finalización para cada una de tus tareas.

13.- Celebra tus logros: ¡recompénsate por haber cumplido con tus objetivos, con tu agenda y por cualquier acontecimiento del día que sea digno de celebración!

14.- Diferencia entre lo urgente y lo importante: a veces estamos más dedicados a temas urgentes que a cosas importantes. Analiza como es tú día a día y dale la vuelta para estar focalizado al máximo en cosas importantes.

15.- Delega: si tienes equipo puedes delegar ciertas tareas para tener más tiempo para temas importantes y a la vez hacer sentir a tu equipo que confías en ellos y que tienen autonomía para liderar proyectos.

Seguro que hay más cosas que mejoran tu productividad pero aquí tienes una buena lista para empezar a implementar aquellas que aún no estás haciendo ¿Tienes algún consejo que no esté aquí y que te funcione? ¡Nos encantará que lo compartas con nosotros!